martes, 20 de noviembre de 2007

EL BIENESTAR SOCIAL COMO UN VALOR FUNDAMENTAL DEL SER HUMANO

Recientes estudios llevados a cabo en diversos países se ha considerado como valor fundamental al bienestar social el cual deberá operar con eficiente en la construcción permanente de una red dinámica de relaciones colectivas.
Los valores y actitudes que apoyaran al bienestar social son la cooperación, el compromiso, la empatía, la igualdad, la tolerancia, la paciencia, entre otros, son valores importantes e indispensables para vigorizar el carácter positivo del ser humano y a practicar las actitudes que les darán la fortaleza de su perfil necesaria para construir una vida sana y exitosa, proporcionándole consejos para reflexionar y discutir, ante todo lo dicho nos plantearemos la hipótesis: ¿Será el bienestar social un valor fundamental del ser en brusquedad de su calidad de vida?

Con ello queremos definir al bienestar social como las actitudes y comportamientos que mejoren la calidad de vida y nos ayuden a llegar a un estado de salud óptima mejorando nuestro estilo de vida en todas sus dimensiones.
Para Amartya (1976), afirma que la calidad de vida es el punto medular del bienestar social deseado, y se obtendrá mediante hábitos saludables que resultan en una adecuada adaptación e integración de las dimensiones físicas, mental, social, espiritual y emocional a cualquier nivel de salud o enfermedad. Cuando hablamos de calidad de vida nos referimos al óptimo bienestar entre las cinco dimensiones de la salud (física, mental, emocional, social y espiritual), también la integración familiar, participación comunitaria activa y el lograr establecer estilos adecuados de vida, tales como la actividad física reglar, buena alimentación, acciones recreativas, entre otras como la calidad ambiental.

DIMENSIONES DEL BIENESTAR:
Un alto nivel de bienestar solo se alcanza cuando existe un balance y estado apropiado de las diversas dimensiones que componen al bienestar. Estos componentes del bienestar son, a saber, lo físico, mental, emocional, social y espiritual.
* Bienestar Físico:
Se refiere al nivel de susceptibilidad a una enfermedad. La persona tiene la sensación (subjetiva) de que ninguno de sus órganos o funciones se encuentran menoscabadas. Se caracteriza por el funcionamiento eficiente del cuerpo, resistencia a enfermedades, la capacidad física de responder apropiadamente a una diversidad de eventos.

* Bienestar Mental o Intelectual:
El bienestar mental representa aquella capacidad requerida para mantener relaciones armoniosas con los demás, satisfacer necesidades instintivas potencialmente en conflicto, sin lesionar a otras personas y ser capaz de participar en las modificaciones positivas del ambiente físico y social.
Toda persona con un apropiado bienestar mental posee un equilibrio interior, intelectual y afectivo. El individuo vive satisfecho de sí mismo, se siente bien con relación a las demás personas y puede hacer frente a las exigencias de la vida.

* Bienestar Social:
Se refiere a la habilidad de interaccionar bien con la gente y el ambiente, habiendo satisfecho las relaciones interpersonales. Aquellos que poseen un apropiado bienestar social pueden integrarse efectivamente en su medio social.

* Bienestar Emocional:
El bienestar emocional representa la habilidad de controlar las emociones, es decir, sentirse cómodo al expresarla y de realizarlo en forma apropiada. Las características emocionales que propician el crecimiento y desarrollo adecuado en la vida emocional del ser humano incluyen la capacidad para controlar efectivamente el estrés negativo, el ser flexivo y el compromiso para revolver conflictos.

* Bienestar Espiritual:
Básicamente, significa aquellas creencias y prácticas religiosas, implica la creencia en una fuerza unificante (de un ser supremo).
El bienestar espiritual representa la habilidad para descubrir y articular un propósito personal en la vida. Es aprender, cómo experimentar amor, disfrutar paz y sentido de logro (autorrealización). Y la disposición y complacencia para servir a otros.
Podemos perfeccionar que el concepto de bienestar hace referencia a la persona humana y es el conjunto de acciones, programas y servicios que se orientan a garantizar una mejor calidad de vida, el desarrollo físico, psicoafectivo, espiritual, social, etc.
- El bien ser para que la persona se capte a sí misma.
- El bien estar para la ubicación de la persona en el ambiente adecuado para su propia desarrollo y para el logro de su fin.
- Bien hacer implica el uso responsable de su inteligencia y libertad.

Todo nos conlleva a un cambio en las actitudes egoístas de grupos de poder económico y político, podría permitir una mejoría social (pero esta tarea no es fácil). Históricamente se alega que los sistemas de protección social, cumplen parcialmente su función benefactora, debido al aumento general de los costos en salud, pensiones, regímenes no contributivos, entre otros.

Un probable ejemplo de políticas inapropiadas, lo representa la exclusión social de sectores de la población (pobres), como si pudiéramos contar con seres humanos de segunda categoría. Las estadísticas nos permiten visualizar niveles diferenciales de bienestar disfrutados por un sector de la población en contraposición a la proliferación de amplias capas de pobreza y marginalidad (o sectores excluidos socialmente). Ello representa nuestra principal preocupación en esta disertación.

Como referente de exclusión social, podemos citar niños(as) en riesgo los cuales se ocupan de diversas actividades laborales, ventas callejeras drogadicción temprana y prostitución infantil. La inserción laboral y explotación humana de adolescentes y adultos mayores, en casos de alcoholismo,, prostitución, drogadicción ilegal, son el pan nuestro de cada día, en diversas ciudades del entorno. A lo anterior, habría que sumarle la migración de la sierra a la costa, los cuales suman una serie de necesidades en el ámbito de la salud, educación, vivienda, asistencia alimentaría, amén de las consecuencias de la desvalorización del hombre y de su exclusión (xenofía) por la aparición de estereotipos y búsqueda social de culpables.

En consecuencia por todo lo anterior detallado diremos que el bienestar social se da:
- El proceso de reforma en seguridad social, debe procurar el aumento en la cobertura de sectores que históricamente no han sido beneficiados, así como el mejoramiento de los regímenes de salud física, psicológica y emocional, entre otros.
- En la seguridad social el principio rector de las comunidades debe ser el faro orientador, como sustento al derecho inalienable de todo ser humano ya sea condición aportativa o no contributiva.
- Además, la equidad y solidaridad humana deberá resplandecer, sobre cualquier forma de privatización y desarticulación de instituciones de reconocida trayectoria social y humanitaria.
- La sostenibilidad financiera deberá articularse a la decisión razonada y por consenso de los diversos actores que conforman la sociedad nacional.
- En la medida de lo posible, el tráfico de influencias políticas, para las reformas deberán estar sujetas a estudios técnicos y actuariales y no a intereses partidistas particulares.


BIBLIOGRAFÍA

Sen, Amartya (1976) Elección Colectiva y Bienestar Social, Traduc. Elías Castillo, Francisco. Alianza Editorial. Madrid

www.uv.es/socialwelfare/proyectos.htm